1. Planea y organiza de tus vacaciones por lo menos con 1 o 2 meses de anticipación.

Planeando en anticipo asegura que puedas conseguir los mejores precios en pasajes aéreos y puedas reservar un buen hotel a muy buen precio. Es ideal tener un plan organizado de lo que quieres gastar en tus vacaciones y en qué tipo de cosas estás dispuesto a ser un poco flexible económicamente.

2. Navega en la web.

Descubre el infinito de posibilidades al buscar tu vuelo, acomodación o recorrido turístico en el internet. Las ofertas son infinitas y puedes encontrar la que más se se acomode a tu bolsillo y tu gusto. Hostales y albergues familiares se encuentran fácilmente en la web, los recorridos o “tours” turísticos ofrecen descuentos por ser reservados en el internet.

3. El transporte público es clave.

Las ciudades turísticas más importantes del mundo ofrecen planes de transporte público económicos para aquellos que buscan moverse dentro de la ciudad como un local. El taxi es una alternativa cómoda y segura, pero puede resultar costoso e innecesario, mientras que los buses, metros y trolley, te dejan descubrir una ciudad desde un punto de vista único.

4. Elige tus destinos cuidadosamente.

Debes tener en cuenta el costo de vida en los lugares que piensas visitar. Puedes considerar permanecer por más tiempo en países en los que el costo de vida es bajo y puedes aprovechar para conocerlo. En esos casos puedes ahorrar dinero al gastar considerablemente menos de lo que gasta en tu propia ciudad.

5.Encuentra entretenimiento gratuito.

En vez de pagar para ver un espectáculo, pregunta a locales por bares que ofrezcan música en vivo y teatros con presentaciones al aire libre. Existen también días especiales en los que los museos tienen entrada libre al igual que galerías y parques con presentaciones de cine al aire libre o festivales de música.

La idea de viajar no sólo es encontrar la mejor manera de ahorrar, sino de disfrutar de tu viaje y absorber todo lo que tiene para ofrecer un destino.

¡Es una aventura, lánzate!